lunes, 10 de marzo de 2008

Reflexiòn nº5. Semana 8

Influencia interlingüística y el aprendiz de la lengua
(Cross- linguistic influence and learner language)

Revisando y reflexionando sobre el capítulo ocho de Brown (2000), me parece que en esta oportunidad este autor astá interesado por el proceso de aprendizaje de una segunda lengua (L2). Brown expone los diferentes puntos de vista de ciertos autores para aclarar lo que son las equivocaciones (mistakes) y los errores (errors). Esto es, en mi opinión, uno de los aspectos que preocupa a los docentes en todo nivel educativo cuando se imparte una L2. Estas equivocaciones y errores se ven reflejados como efectos que tiene la lengua materna (L1) en la adquisición de una L2.
En reiteradas oportunidades he observado en muchos estudiantes la interferencia o influencia de la L1 cuando se quiere expresar en la L2. Brown, en consideración a estas interferencias, y otros aspectos no menos importante, desarrolla este capítulo que sirve de herramienta para cualquier docente que desee en cuanto al análisis de errores se refiere. Debo reconocer que este autor me sorprende en cada capítulo. En mi conocimiento académico no existía la diferencia entre estas dos palabras vinculadas a la enseñanza de una L2. La interferencia o influencia de L1 se manifiesta a través del intralengua e interlengua de un estudiante durante el aprendizaje de una L2. Ambos términos fueron bien definidos al dar a conocer por qué los estudiantes presentan esta situación y qué acción puede ser tomar al momento de que ocurra. Las equivocaciones y errores que los estudiantes comenten casi a diario durante las clases de inlgés, en mi caso, son punto de reflexión para mí.
Brown explica otro aspecto dentro del análisis de errores: la variación de ciertas formas lingüísticas, es decir, modo cómo habla y escribe un estudiante una L2, lo cual está vinculado al desarrollo de la interlengua. Saber que la variación que se presenta en los estudiantes depende del contexto lingüístico, los fatores de desarrollo psicológico, la función del lenguaje, el contexto social−y dentro de éste el contexto escolar−, me agrada y me permite comprender más cada día el proceso de desarrollo de una L2. Me resulta ameno este capítulo, porque Brown demuestra interés, según mi percepción, por el contexto donde se desarrolla en aprendizaje, debido a que en mi caso éste es uno de los detalles que dificulta mi ejercicio docente y el aprendizaje significativo de mis estudiantes.
Brown relaciona la variación con la fosilización, término que utiliza Vigil y Oller (en Brown, 2000) para referirse a las retroalimentaciones (feedback) positivas, neutrales y negativas que le da un facilitador a un estudiante. Al respecto, siempre he pensado que es muy determinante y hasta trascendente para un estudiante cuando un docente cree que el feedback es sinónimo de humillación y de alguna otra acción negativa. Saber que el conocimiento de un L1, más que afectar, influye de manera inconciente, en ciertos casos, a los estudiantes en su proceso de aprendizaje de una L2. Todo esto me permite preguntarme: ¿qué tan normal es para un estudiante de una L2 utilizar palabras, en repetidas ocasiones, de una L1? Hemos conocido a través de estas lecturas que el aprendizaje que una lengua extranjera se considera como adquirida cuando existe en el vocabulario de un estudiante de L2 300 palabras como mínimo. Entonces me pregunto: ¿existe una verdadera adquisición de una L2 cuando el vocabulario de un estudiante contiene 300 palabras y aun éste presenta en repetidas ocaciones las interferencias de una L1?
Otro aporte muy importante a este tema está representado por Lightbown y Spada (2006). Estos autores convergen en los los siguientes aspectos: el análisis contrastivo, el análisis de los errores, la interlengua y su fosilización.Considero que todos los esfuerzos por demostrar cuándo y cómo se producen los errores de los estudiantes durante el proceso de aprendizaje de una L2 están bien sustentados cuándo observamos a los aprendices en su producción oral y escrita de una L2. A partir de todas estas explicaciones podré estar más consciente de lo que implica para un estudiante aprender una L2 y como ser un instrumento que permite el logro satisfactorio del mismo en la medida en que los factores sociopolíticos y las características personales de los estudiantes lo permitan.
Referencias:
Brown, H. Douglas (2000). Principles of language learning and teaching. Fourth edition. White Plains, N.Y: Addison Wesley Longman.

Cook, Vivian (1996). Second language learning and teaching. London, UK: Edward Arnold.

Lightbown, Patsy M. and Spada, Nina (2006). How languages are learned. Oxford, UK: Oxford University Press.

1 comentario:

Berta dijo...

El concepto del interlenguage del aprendiz de una L2 cada día es más tomado en cuenta y respetado por quienes lo estudian. Será difícil para el docente conocer en qué fase está cada uno de sus estudiantes, pero el sólo hecho de estar conscientes de su existencia le hará actuar de manera más comprensiva a la hora de manejar los errores (o equivocaciones) de sus estudiantes en su intento porque ellos no lleguen a fosilizarlos e internalizarlos.
Creo que hay confusión con respecto al número de palabras que un aprendiz debe conocer para comenzar a manejar una L2. No son 300 sino 3.000 el número de palabras que los investigadores sostienen que se deben conocer para poder LEER eficientemente en una L2. La mayor parte de las investigaciones se han centrado en la lectura pero probablemente un número similar sería necesario para desenvolvernos en las otras tres destrezas. Este número de palabras incrementará a medida que el estudiante continue practicando y aprendiendo la lengua, y le permitirá aplicar destrezas tales como la adivinanza del significado por contexto, algo que le sería muy difícil o imposible de lograr sin el conocimiento del 95% de los términos en una oración. Por eso se deben conocer inicialmente las palabras de uso frecuente. He tenido estudiantes que no saben términos tan comunes como "the" o "sun". La semana pasada, de hecho, una estudiante del segundo nivel me preguntó qué significaba "a woman won" en una oración, y esta es una estudiante dedicada que suele obtener buenas notas en nuestros exámenes de vocabulario porque estudia de manera constante pero su conocimiento inicial del inglés era muy bajo.
Queda todavía por descubrir cuál es la mejor y más efectiva manera de corregir los errores de los estudiantes. Nosotros como profesores invertimos buena parte de nuestro tiempo a realizar correcciones de sus tareas y ejercicios no siempre obteniendo el cambio que deseamos en ellos ¿por qué no lo logramos? ¿qué otras maneras tenemos para obtenerlo?
Gracias por no sólo permitirme leer tus reflexiones, sino también por darme material para pensar y generar las mías propias.